Kristina Picard
Formar parte de esta asociación me hace sentirme completa, siempre siento que recibo más de lo que doy
ASPANOVAS
Formar parte de esta asociación me hace sentirme completa, siempre siento que recibo más de lo que doy
ASPANOVAS
Me llamo Kristina Picard y tengo 30 años. Soy estadounidense, pero llevo 7 años viviendo en Bilbao. Siempre me ha gustado implicarme en mi comunidad y eso es lo que me llevó a empezar a trabajar como voluntaria en ASPANOVAS, que es una asociación de Bizkaia de padres y madres de niños, niñas y adolescentes con cáncer. En ASPANOVAS no sólo se centran en la enfermedad, sino también en el bienestar psicológico, el apoyo, la educación y el entretenimiento de los niños y sus familias.
Mi relación con ASPANOVAS empezó cuando estaba haciendo una investigación de los recursos que tienen las niñas, niños y adolescentes con cáncer tanto dentro como fuera del hospital de Cruces, centrado en la perspectiva de la salud mental y su relación con el ocio. La investigación se realizó a través del Trabajo Fin de Máster de Dirección de Proyectos de Ocio. Así, tuve la oportunidad de realizar entrevistas con representantes de ASPANOVAS, padres y madres de niños con cáncer, y doctores y enfermeras del ámbito de la oncología pediátrica en el hospital de Cruces.
Gracias a esta investigación me di cuenta de la importancia del trabajo que se realiza a través de ASPANOVAS y lo esencial que es para el bienestar de las niñas, niños y adolescentes y sus respectivas familias. También pude ver en primera persona todo el trabajo que hacen y decidí involucrarme más. En el tiempo que llevo como voluntaria en ASPANOVAS, he ido a excursiones de tiempo libre con las niñas, niños y sus familias, he realizado un taller de sensibilización en centros educativos, he trabajado en mesas informativas, he participado en una carrera y he organizado talleres de cuentos y manualidades en el hospital.
Formar parte de esta asociación me hace sentirme completa, siempre siento que recibo más de lo que doy. ASPANOVAS es una asociación generosa que busca constantemente formas de ayudar a su comunidad. Durante mi labor de voluntaria me he sentido muy bien acogida y siempre me han animado a explorar mis puntos fuertes y talentos. Estoy agradecida por haber tenido la oportunidad de trabajar como voluntaria en esta organización y animo a todas las personas que se estén planteando si participar o no en su comunidad a que den el salto de fe. Les prometo que no se arrepentirán.