"La solidaridad es la respuesta" - Natalia Rodríguez

Las ONGD que componen la Coordinadora de ONG de Desarrollo de Euskadi son la base sobre la que pivota la cooperación desde sus inicios; el compromiso solidario de muchas personas de esta sociedad se canaliza a través de las mismas, y pese a las enormes dificultades y limitaciones, siempre siguen trabajando por no dejar a nadie atrás.

Natalia Rodríguez

La Coordinadora de ONG de Desarrollo de Euskadi es un colectivo de organizaciones no gubernamentales de desarrollo (ONGD) vascas que trabajan en cooperación internacional y en educación para la transformación social. Nació en 1988 de la mano de 11 organizaciones fundadoras con el objetivo de cooperar, reflexionar, dialogar y trabajar para que las organizaciones socias actúen de manera coordinada, y para que sus intervenciones sean coherentes y adecuadas. En 2023, agrupa a 85 ONGD socias, con más de 135 sedes implantadas en los diferentes territorios de Euskadi, 58 de ellas en Bizkaia. Somos una red que, a través de la coordinación y el acompañamiento a sus entidades asociadas, busca la representación y la interlocución prioritaria de un sector que apuesta por la Coordinadora de ONGD de Euskadi para ejercer la portavocía con otros agentes de cooperación o de transformación social y con las instituciones públicas.

El contexto no acompaña a la acción solidaria: conflictividad creciente, persecución de los espacios cívicos junto con un mayor desarraigo social de la solidaridad… Sin embargo, todo ello hace que nuestra misión y continuar fortaleciendo el sector sea más necesario que nunca. Para abordar todo ello, trabajamos de forma transversal diferentes enfoques: derechos humanos, transformación social, equidad de género transitando hacia una cooperación feminista, enfoque local-global y el enfoque de derechos de la naturaleza.

La Coordinadora de ONGD de Euskadi se compone de distintos espacios, cada uno con sus funciones y competencias: educación para la transformación social, género, comunicación, fortalecimiento del sector, incidencia política… De hecho, entendemos que uno de los pilares básicos de las ONGD organizadas y coordinadas debe ser la actividad de esta incidencia política, entendida como herramienta que vela por la política de cooperación, por su consolidación, por su importancia y por su trabajo esencial con las personas más vulnerables del planeta.

Partiendo de la premisa de la justicia social, trabajamos desde el paradigma del desarrollo humano sostenible poniendo la vida de las personas y su dignidad en el centro. Entendemos la cooperación al desarrollo como el trabajo conjunto que desde Euskadi realizamos con los pueblos empobrecidos para eliminar los obstáculos que impiden su desarrollo. Entendemos que se trata de un proceso basado en la justicia social, la solidaridad, la reciprocidad, el desinterés y la gratuidad, mucho más allá de una mera transferencia económica o de la caridad. Parece obvio que los problemas y retos de desarrollo no los podemos enfrentar en solitario, y que la confluencia y la suma de sinergias aportan un valor añadido, pero sin perder de vista el principio de reciprocidad, gratuidad y desinterés que nos ha acompañado siempre en Euskadi, haciendo de la cooperación vasca un modelo ejemplar y reconocido a nivel internacional.

Vivimos en un contexto en el que nos enfrentamos a enormes retos como guerras, migraciones masivas, creciente desigualdad y aumento de la brecha de la pobreza que como siempre tiene fundamentalmente rostro de mujer, vulneraciones constantes de derechos humanos… Actuar local y globalmente para superar los problemas interconectados de este mundo es más urgente que nunca, y, para ello, el trabajo de las ONGD junto a otros agentes sociales y la ciudadanía es fundamental.  Precisamente, la ciudadanía tiene a su alcance numerosas herramientas para contribuir al cambio social desde su ámbito más cercano: tomar conciencia del estado del mundo, movilizarse y denunciar las injusticias, apostar por el consumo responsable y transformador, comprometerse con la equidad de género, alejarse de los comportamientos individualistas o participar en las ONGD son solo algunas de ellas. ¿Te sumas al cambio?

Natalia Rodríguez

Responsable del área de incidencia política en la Coordinadora de ONG de Desarrollo de Euskadi